DE UN MUNDO PERDIDO
De un mundo perdido donde nada valgo,
de un mundo perdido donde nada soy;
de allí Jesucristo pudo levantarme
de un mundo entregado a la perdición.
Donde nadie sabe que existe la vida,
donde nadie sabe que existe el amor.
Donde son puñales los que se respiran
porque tienen odio en el corazón.
Donde son puñales los que se respiran
porque tienen odio en el corazón.
Coro
Pero ahora me encuentro dichoso,
porque tengo un mundo de amor.
Porque es hermoso lo que se contempla,
son lindas las sendas de mi Salvador.
Porque es hermoso lo que se contempla,
son lindas las sendas de mi Salvador.
Porque Jesucristo me encontró llorando
al cielo implorando por su piedad.
Desde entonces yo fui redimido
y de Dios escogido para liberar.
Desde entonces yo fui redimido
y de Dios escogido para liberar.
Compositor: Jorge Menelio Tróchez