QUIERO SER SANTO
Quiero ser santo, Señor, me cuesta tanto seguirte.
Quiero ser santo, Señor, porque Vos me lo pediste.
Y aunque me cueste, aunque no pueda,
aunque reviente, aunque me muera...
Sólo lanzado a la aventura de tu amor,
mi vida tiene sentido.
Con los pies en la tierra, pero los ojos en el Cielo,
necesito tu mano, porque solo no puedo.