Los ejes de mi carreta
Porque no engraso los ejes,
me llaman abandonao;
si a mí me gusta que suenen,
¿pa' qué los quiero engrasaos?
Es demasiado aburrido
seguir y seguir la huella;
demasiao largo el camino,
sin nada que me entretenga.
No necesito silencio;
ya no tengo en qué pensar.
Tenía, pero hace tiempo:
ahora ya no pienso más.
Los ejes de mi carreta
nunca los voy a engrasar.
Autor(es): Romildo Risso, Atahualpa Yupanqui