Barbijos


Como un barbijo de plata
que abre un pedazo de cielo,
asoma la luna llena
sobre la pampa en silencio.
Y el cañadón que dormido
bajo los sauces se acuesta,
entre la noche parece
como un barbijo de tierra.

Barbijo de luz de luna
que entraba por mi ventana,
barbijo que en la laguna
dejaba tu mano blanca…
Quién puso el arma en tu mano
para que hicieras en mi alma,
este barbijo de pena
que poco a poco me mata.

Cómo me duelen los labios
de tanto y tanto llamarte,
vergüenza que me lastima
por no saber olvidarte…
Y el corazón que no entiende
junto a mi pecho solloza,
no le importan tus barbijos
y tiernamente te nombra.


Autor(es): Reinaldo Yiso, Héctor Stamponi