A más de nueve mil metros de altura
Tu mano se hace amiga de mi cuerpo
en un vuelo a Madrid, desprevenida
a más de nueve mil metros de altura
olvido mi cordura, doy paso a mi locura
Sellamos un pacto de silencios...
planeamos encuentros sin promesas
nos despedimos como dos extraños
me llevo tus secretos de regalo.
Al reencontrarnos...
un paraíso para los sentidos
tu boca , mi alimento preferido
tu cuerpo , amalgamado con el mío
al reencontrarnos...
El sexo, el mejor premio recibido
tus ojos , tan negros , tan morenos
una autopista que me lleva al cielo.
Me duermo custodiada por tu abrazo,
tus sueños se mezclan en los míos
eterno conocido de otras vidas
y en esta vida tan desconocido.
Y no sé si olvidarte o extrañarte
pero vivo un romance al recordarte
te espero y en la orilla de tu cuello
tengo un refugio de mar y besos.
Autor(es): María José Demare, Daniel García