Mi sábado sin vos
Las circunstancias caprichosas del vaivén
hoy me obligaron a este sábado sin vos.
Y está desnuda Buenos Aires sin tu piel,
dolor de amanecer con gusto a sinsabor.
Hoy no será lo mismo que otros días.
Hoy no tendrá mi noche tus alegría
ni veremos por Callao
después de un cine y un café,
la madrugada del domingo
convertirse en un pájaro de sol.
Hoy, mi sábado sin vos
será una mufa larga, nada más.
Caminaré para agotar mi soledad
sin comprender
porqué este sábado ritual no estás conmigo
compartiendo un cigarrillo y una forma de pensar...
Iré por la ciudad
como un viajero abúlico y sin fe.
Y echando amarras en un bar
a esta aventura sin color
en una express
consumaré mi sábado sin vos.
En el barullo de Corrientes me hundiré
para aturdirme de mercurio y de neón.
Así tal vez por un momento olvidaré
la causa de mi sed, perdido en el montón.
Recorreré por viejas librerías
con la mirada lenta y aburrida
los poemas de Tuñón.
Y luego al filo de las diez
arrimaré por una esquina
mi cansada nostalgia sin timón...
Autor(es): Mario Iaquinandi