La percanta está triste
La percanta está triste
¿qué tendrá la percanta?
En sus ojos hinchados
se asoma una lágrima,
rueda y se pianta.
La percanta está triste,
no hace más que gemir...
Ya no ríe, no baila, ni canta
y la pobre percanta
no puede dormir...
De su cara rosada
se ha piantado el color
y ha quedado marchita
como pálida flor.
Sus ojazos no brillan
han perdido el fulgor
y sus labios de fuego
ya no tienen calor...
Otra mina más papa
al bacán le quitó
y la pobre percanta
amurada quedó.
La percanta está triste
y no puede vivir...
Su dolor es tan grande y profundo
que esgunfia del mundo...
se quiere escurrir.
Autor(es): Julián Porteño, Vicente Greco