Chalten

Folklore argentino

Madre roca, padre cielo,
tu llanto descansa al pie de los ventisqueros,
y cada estrella se posa en tu cima blanca
alumbrando el camino de los silencios.

Madre roca, padre cielo,
a veces me lleva el alba con un arreo,
entonces mi piño blanco trepa tu senda
y mis ojos se quedan en tu misterio.

Cerro, cerro de mi Patagonia,
no sabes, chaltén, cuánto te amo,
cuando se desploma la nevada
y cantan los vientos en tus grietas,
en el idioma puro de mi raza.
Aoniquen chaltén, aoniquen chaltén.

Madre roca, padre cielo,
el Dios que adoró el tehuelche pintó el lucero,
y yo que vivo en tu falda gastando tiempos
te canto vadeando el río de los recuerdos.

Madre roca, padre cielo,
hermano de mi vigilia quiero ser cerro,
para ganarte en altura de piedra eterna
quedando siempre de pie sobre la tierra.

Cerro, cerro de mi Patagonia,
no sabes, chaltén, cuánto te amo,
cuando se desploma la nevada
y cantan los vientos en tus grietas,
en el idioma puro de mi raza.
Aoniquen chaltén, aoniquen chaltén.

Autor(es): Hugo Giménez Agüero
Para citar esta página: https://canciones-cristianas.com/cancion/40210/chalten-folklore-argentino
2024 Cancioneros.com/Letras