Justito a las seis

Tangos

He vuelto a la esquina, que en mis años mozos
fumando en mi espera, al atardecer
me prestó su ochava, callada testigo
cuando ella llegaba justito a las seis.

Esquina compinche del barrio de Flores
que fue nuestra cita un lejano ayer,
cuando por sus calles llegaba a mi lado
mi novia querida, justito a las seis.

Dulce novia mía, dueña de mis sueños
que amé profesando tierna devoción
quiero que las notas que evocan tu nombre
vuelen con el viento, de esta, tu canción.
Y le pido al cielo, si es que hay otra vida,
reviva la dicha que tuve esa vez
cuando presurosa venía sonriente
a encontrar mis brazos, justito a las seis.

Hoy estoy parado en el mismo sitio
la vista perdida, creyéndola ver
y aunque sé que nunca volverá a mi encuentro
la sigo esperando justito a las seis.

Un rocío terco me nubla los ojos
añorando tiempos que no han de volver,
pero en mi recuerdo llevaré su imagen
que llega radiante justito a las seis.

Autor(es): José Surachi
Para citar esta página: https://canciones-cristianas.com/cancion/49573/justito-a-las-seis-tangos
2024 Cancioneros.com/Letras